
Si has venido ya a Berlín seguramente habrás ya pasado por allí. Si estás planeando venir, muy probablemente esté en tu lista de imprescindibles. Si vienes algún día, muy probablemente lo termines visitado. Es uno de los lugares más odiados por los berlineses.
Se encuentra el cruce entre Friedrichstraße y Zimmerstraße. Un pequeño garito de madera, una bandera americana, una gran foto de un chaval (que no es Charlie) y mucha, mucha gente alrededor. Muchos berlineses conocen a esta esquina de Berlín como el Disney Berlinés. Por ser uno de los lugares más visitados y concurridos por los molestos turistas.
Allí se encuentran varios (posibles) actores vestidos de soldados con los que (por un módico precio) te puedes hacer una foto con ellos.
¿La gente en serio se hace foto con ellos? Sí, se las hace. ¿Porqué? ¿Cuál es la gracia? Pues no lo sé, pero se las hacen. Tendré que preguntar a mi madre…

En Berlín había tres checkpoints que eran los puntos de entrada y salida entre la Alemania del Este y del Oeste. El primero, checkpoint Alpha, está en algún lugar al norte de Berlín. El segundo, checkpoint Beta, en la autopista que va de Berlín a Potsdam. Finalmente el tercero, checkpoint Charlie, es el que está en el centro de Berlín. Eran usados principalmente por funcionarios aliados para moverse entre los dos Berlines.
Lo que ahora es una atracción turística que ni siquiera conserva nada de sus elementos originales fue punto de dos de las historias más importantes de la Berlín dividida.
Aquel 22 de Octubre de 1961 seguramente que todo el mundo se despertó pensando que sería un día normal, hasta que un alto mando soviético mandó a los soldados encargados de no dejar pasar a funcionarios aliados al lado soviético. Esta decisión fue escalando hasta tal punto que se posicionaron 10 tanques soviéticos por un lado y otros tantos americanos encañonándose uno a uno. La tensión se llegó a notar en el ambiente. Que un tanque se moviese un milímetro al frente podía significar la guerra, un milímetro atrás la rendición. Llegó hasta altos mandatarios políticos americanos y rusos para poder destensar la situación.

La otra historia es menos bélica, pero mucho más triste. Es la historia de Peter Fechter. Peter decidió con un amigo que ya había llegado el momento de escapar del Berlín Este y saltar al Berlín Oeste, así que planearon que ese 17 de agosto de 1962 era el momento de escapar. Lo tenían todo planeado, menos el disparo que recibió Peter mientras intentaba escalar el muro. Nadie lo ayudó. Los soldados soviéticos lo dejaron allí tirado y el resto de gente que había, observando, en el lado occidental no se movieron por miedo a ser disparados también. El triste resultado fue que Peter estuvo durante una hora desangrándose y agonizando hasta finalmente morir.
No sé si será cierto, pero se dice que la famosa canción Libre de Nino Bravo iba dedicada a Peter. Si prestáis atención a la letra, es posible.
Bonus track Cheesecake

No tengo un lugar favorito de Cheesecake por la zona, así que hablaré del último que hemos probado. Kaffeemitte se encuentra en la céntrica zona del Hackescher Markt (sólo a 5 minutos andando) en la calle WeinMeisterstraße (para nosotros, los españoles, también conocida como calle del maestro vinícola 🙂 ) Nos tomamos dos capuccinos, un cheesecake y ese brownie raro con algo whitie… Pensábamos que era un marmorkuchen, que resultó no ser. Tiene una buena y gran terraza que en los días de frío no hay quien se atreva a sentarse y los de sol y calor no hay quien encuentre mesa. No está mal el lugar y, si os encontráis por la zona, podéis pasaros. Sin embargo, creo que hay otros lugares mejores en Berlín de los que disfrutar de un buen capuccino y trozo de pastel. Seguiré investigando y os mantendré informados!!
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